Nahuel Guzmán, el extranjero que le dio una clase de valores a los mexicanos
El portero de Tigres, Nahuel Guzmán, protestó y pidió justicia por uno de los males más arraigados en la sociedad mexicana: los feminicidios y más en específico, el caso de la muerte de Debanhi Escobar en Nuevo León, el estado al que pertenece su equipo.
Una playera negra y la leyenda “Justicia” al centro, esas fueron las herramientas con las que Guzmán saltó al campo del Estadio Universitario para calentar y con las que demostró tener mucho más valor que millones de mexicanos, quienes siguen centrando sus miradas en otras situaciones –evidentemente– menos importantes.
Salir con un listón morado en un llamado a la no violencia contra las mujeres fue la medida que Tigres y América realizaron para su partido tras el caso de Debanhi; sin embargo, para el guardameta felino no fue suficiente, se necesitaba más contundencia en su mensaje.
Nahuel Guzmán salió al calentamiento con una camisa con la leyenda "Justicia" y un moño morado tras darse a el caso de Debanhi Escobar y la ola de desapariciones en Nuevo León pic.twitter.com/b5cIzFoaDO
— Rafael Rivera (@RafaDato2) April 23, 2022
En múltiples ocasiones se le ha cuestionado a Guzmán su actuar tanto dentro como fuera de la cancha, algunos hasta lo han tachado de antidepotivo y canchero. En el propio juego contra América, salió a relucir esa “fama” cuando fingió una falta para evitar el cobro de un tiro libre. No obstante, en momentos tan delicados cómo los que atraviesa el país y Nuevo León, lo deportivo siempre pasa a segundo término.
El futbol es la cosa más importante de las cosas menos importantes, dijo en algún momento Jorge Valdano; y ante la ola de desapariciones en el estado y la polémica muerte de la joven de 18 años, volvió a cobrar sentido; uno que el arquero felino entendió muy bien.
A pesar de que es uno de los personajes más polarizantes del futbol mexicano, en esta ocasión, el Patón se ganó el respeto de los aficionados, que, aunque no compartan colores con él, valoraron su gesto. Aunque sí, muchos siguieron mostrando resistencia y le lanzaron críticas por "doble moral".
Durante la final de la Liga MX femenil en diciembre de 2021 entre Amazonas y Rayadas, Tigres lanzó una campaña para que la afición lanzara peluches y estos pudieran ser donados. Guzmán hizo lo propio, pero aventó su donación cerca del área de calentamiento de las jugadores rivales, hecho que fue mal visto pero que después se aclaró: "Yo ya me iba a la cabina de transmisión, había llevado mi peluche y no me quería quedar sin aventarlo", aseguró el guardameta argentino.
...también es un orgullo formar parte de esta Institución q promueve este tipo de iniciativas, comprendiendo y aceptando una labor social responsable...en este caso y junto a la afición, para q un niño o niña puedan sonreír esta Navidad 🎅🏻.
Pd: yo tb llevé y lancé mi peluche ☺ pic.twitter.com/MspFbZIm0I— Nahuel.I.Guzman (@PatonGuzman) December 21, 2021
Hace falta valor cuando se realizan protestas siendo privilegiado, teniendo etiqueta de extranjero y contando con un polémico pasado en el futbol mexicano.
Guzmán no es un santo y no es un personaje que haya hecho público su deseo de redención, es alguien que siempre ha demostrado ser fiel a sus ideales, y con su acto en el juego contra Las Águilas dio cátedra de ello.
Algunos siguen creyendo que cuando se es ajeno al problema la postura debe ser siempre neutral, gris, como muchos futbolistas de la liga. No se vio a otro valiente con la misma intención de exigir justicia a las autoridades, ni de aquí ni de afuera, por ello el valor de lo que hizo Guzmán.
Una de las principales críticas a la Liga MX es la cantidad y calidad de extranjeros que llegan: algunos vienen y se van sin dejar rastro, pero foráneos como Guzmán siempre dejarán su huella; ya sea por su rendimiento en la cancha o por su capacidad para ser portavoz del sentir de un país que ni siquiera es el suyo.
Actos como el que hizo en el Volcan inmortalizan aún más su legado, que aunque es brillante, sigue sin ser del todo pulcro.
La oscuridad de Nahuel
Es cierto que un acto de solidaridad y protesta representan una valía poco comparable, pero eso no borra los momentos oscuros que ha vivido desde que llegó a México en 2014. “Nahueladas”, así se han calificado a aquellos incidentes de los que ha sido protagonista y que le han construido una fama de villano.
Burlarse del peso
En el Clausura 2017 Tigres y Rayados se enfrentaron en los cuartos de final, y aunque los universitarios se llevaron la llave por un contundente 6 a 1 global, las polémicas no faltaron, y en una de ellas el Patón fue el actor principal.
Aunque la serie ya estaba encaminada, Edwin Cardona, entonces jugador de Monterrey se cruzó con Guzmán y se hicieron de palabras en el campo, algo que no tomó muy bien el argentino, quien como respuesta, hizo gestos de burla haciendo referencia al estado físico del colombiano.
Baile del pingüino
Un torneo después del incidente con Edwin Cardona, la controversia llegó a Nahuel en un Clásico Regio. En la fecha 17 del certamen el portero se metió con la afición rival, arrancó el césped del campo y generó que Antonio Mohamed, entonces técnico de Monterrey se lanzara contra él.
Rayados ganó 2 a 0 y durante el compromiso la hinchada de La Pandilla se metió con Guzmán, quien respondió señalando el pecho para contar las estrellas de su escudo y moviéndose como un pingüino, mote atribuido a Monterrey “por ser pechos fríos”.
El baile del Pingüino de Nahuel Guzmán 🐧 @adnazteca pic.twitter.com/1gMIDEICIu
— Alejandro Aguirre (@RegioAguirre) November 19, 2017
Ante tal suceso, el Turco se fue contra él y declaró: "Creo que los de adentro siempre tenemos que dar el ejemplo hacia afuera, así que lo que pasa en la cancha queda dentro de la cancha. Los árbitros tienen que ser un poquito más rigurosos con la gente que provoca a la afición, los de adentro tenemos que ser mucho más respetuosos con la afición".